"Cuentan que, en cierta ocasión, Sócrates entró en una tienda de misceláneas. Luego de demorarse un largo rato observando en detalle cada artículo, salió del lugar claramente asombrado. Cuando le preguntaron el motivo de su sorpresa, respondió: 'Estoy fascinado, ¡cuántas cosas no necesito!'"
Caminante, son tus huellas el camino y nada más; caminante, no hay camino, se hace camino al andar.
sábado, marzo 25, 2006
miércoles, marzo 01, 2006

Raoul Vaneigem
Suscribirse a:
Entradas (Atom)