"La vida acaricia con dedos amorosos la piel tersa y suave, aún virgen, de Á. Todavía no ha experimentado en sus carnes que un instante, un imperceptible y minúsculo pedacito de tiempo, es más que suficiente para que las garras de la vida destrocen por completo el paraíso inocente de arrebatados amores adolescentes y amistades selladas con sangre que hasta ahora conforman toda su existencia".
No hay comentarios:
Publicar un comentario