"Apenas puedo respirar. El aire parece un líquido viscoso que se pega a mis conductos respiratorios. Me ahogo.
Desterrado al rincón de los castigados con los brazos en cruz. ¿Acaso he pecado?
Desconozco las preguntas. Ignoro las respuestas.
Mi vida sin mí. Un extranjero en mi existencia me siento. Así soy.
Allí a lo lejos, donde parece que nadie exista, en ese lugar donde la dichosa soledad reine, hasta allí caminaré".
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